14/05/2024SOCIEDAD

“Tuvimos el privilegio de disfrutar de un enorme músico”. “Él le encontraba la vuelta para pintar de otro color las melodías”

Un Maestro de la música habló de la calidad de Maestro en el bandoneón y el acordeón, que fue Albino Lang. Ángel “Tuti” Schamberger, director de la Escuela de Música, dijo a quienes hacemos La Nueva Radio Suárez que el querido Albino era exquisito en los arreglos de cada tema. Impecable en este proceso que sólo logran hacer los que saben muchísimo y aman lo que hacen, en este proceso de pintar con otros colores una melodía.

“Un montón de cosas lindas se pueden hablar de Albino” indicó Ángel Schamberger en el comienzo de la entrevista. “Desde lo musical, todo lo que se dice, todo lo que se reconoce, es así. Albino hizo de la música su oficio y lo llevó al extremo en la calidad, y algo más destacable es que lo hizo desde acá. Eso no es un dato menor. Quien puede acceder a las grandes casas de estudio o estar en relación directa con los grandes músicos que juegan en primera, se van nutriendo de esas cosas”. Pero Albino lo hizo desde acá, desde Coronel Suárez, logrando “cosas increíbles musicalmente, de una calidad y una belleza tremenda, una sensibilidad maravillosa”.

Recordó que el Maestro Albino Lang alguna vez dijo en entrevista con La Nueva Radio Suárez que pegado a la radio aprendía de lo que escuchaba. “Eso es lo que marca a los músicos de la generación de Albino” dijo el entrevistado, agregando también que la gente de su generación, los músicos, vivieron la época en la que se tocaba en bailes, arrancando muy de chiquito. “Él, si bien estudió con su tío, hizo escuela tocando. Mil horas de vuelo tocando. Eso tocó a un montón de músicos de esa generación, y Albino fue el referente en eso”.

Recordó otro relato, algo que es común a los músicos: cuando en mitad de la noche se te ocurre un arreglo y lo tenés que sacar, escribir, practicar. “Esas cosas son esto de vivir con pasión eso que se ama y que se tiene como oficio. Eso es fantástico. Es un oficio de 7 por 24. Lo permite la música y no sé qué otras tantas cosas”.

Consultado en qué ponía el foco, el énfasis, indicó que “tenía una visión integral de lo que es hacer música. Del ajuste rítmico, de la afinación”. Contó que para Albino Lang fue un desafío grande sumarse a la Escuela de Música -ahí enseñaba acordeón-, “donde sumó un montón de cosas”.

Otra vivencia espectacular, de pasión compartida, teniendo a Albino como protagonista: “Cuando te ponías a hacer música con él, tenía una gran capacidad de armonizar y rearmonizar. Como ponerle color a las melodías. Él le encontraba la vuelta para pintarlas de otro color. Algo que disfrutábamos muchos era tocar ‘a la parrilla’: tocar ciertos acordes en una vuelta, la segunda vuelta tocar otros y tratar de descubrir esos acordes. Nos mirábamos y sabíamos para dónde iba. Esa picardía de cambiar acordes, probar cosas. Poder descubrirlo y seguirlo para nosotros era como un chiste, como un juego. Para nosotros era divertirnos cambiando acordes y que el otro se de cuenta. Tratando de descubrir qué acorde había puesto el otro”, relata Schamberger, dando a conocer momentos de juego, picardías, con la música como protagonista, entre Albino y lo que él llamaba sus amigos de ahora. “Apreciamos mucho compartir con él. Disfrutar del tocar desde lo más sencillo hasta lo más complejo. El disfrute por la música fue su sello”.

Sumarlo a la Escuela fue súper sencillo, cuenta el Director de este establecimiento, porque, dice, compartieron con él esta mirada, “que la música no es para guardárselo debajo de la cama, es algo para compartir. Y él lo tenía eso re claro y vivió toda su vida compartiendo su música. Desde su conocimiento en una clase, al hecho de tocar frente a mucha gente. Esa es una de sus improntas: la generosidad de compartir la música y no quedársela”.

Momentos excelsos, irrepetibles, quedan en la memoria de mucha gente que disfrutó de Albino Lang y su bandoneón en cada presentación. “Lo que tenía para decirle a él, lo hablamos, hablamos mucho -dijo ‘Tuti’ Schamberger-; decirle a la comunidad que disfrutaron de un enorme músico. Tuvimos el privilegio de disfrutar de un enorme músico. Tenemos que guardarlo en el recuerdo como algo valiosísimo y súper importante para la cultura suarense”.